IRONHIDE
Las oficinas de Ironhide Games Studios están diseñadas para capturar la esencia creativa e innovadora de una empresa de videojuegos en constante crecimiento. Este espacio tiene como objetivo fomentar la colaboración, la creatividad y la comodidad a través de un diseño arquitectónico que refleja el dinamismo de su cultura corporativa.
Ubicación: Montevideo. Uruguay
Proyecto: Oficinas
Año: 2015
Superficie construida/ a construir: 450 mt2
Alcance: Diseño, Proyecto ejecutivo y Dirección de Obra.
Equipo: Arq. Sebastián Martínez, Arq. Nicolás Rudolph
El diseño integra cuatro unidades independientes en un único espacio cohesivo, creando una tipología con bordes geométricos intencionalmente desordenados. Este enfoque arquitectónico fomenta la creatividad y la interacción en un entorno que desafía las convenciones tradicionales, adaptándose a la naturaleza vibrante e innovadora del sector de los videojuegos.
El espacio se organiza mediante un esquema cromático gradual que transita desde el rojo, pasando por el naranja, amarillo, verde, celeste y azul, hasta llegar al violeta. Este degradado de colores no solo aporta una identidad visual única al proyecto, sino que también refuerza la conexión entre las distintas áreas funcionales, integrando de manera fluida el mobiliario, las alfombras y una banda articulada que recorre todo el programa. Este tratamiento cromático contribuye tanto a la orientación intuitiva dentro del espacio como a la creación de un entorno dinámico y estimulante.
En el núcleo central del proyecto, se encuentran pequeñas cápsulas diseñadas como salas de reunión y videoconferencia. Estas cápsulas, revestidas con paneles de madera, generan un contraste cálido y acogedor, creando un efecto de «habitación dentro de una habitación». Además, las paredes de pizarra incorporadas en estas áreas ofrecen una superficie funcional para anotaciones, promoviendo la colaboración y el intercambio de ideas, fundamentales para los valores de la marca.
La propuesta también incluye zonas destinadas al entretenimiento y la socialización, separadas del área de trabajo mediante un punto centrífugo en el plan arquitectónico. Este diseño permite un equilibrio entre productividad y descanso, potenciando la cultura organizacional de la empresa.